16 may 2015
La carrera por lanzar el vehículo 100% autónomo no está fácil, Google lo sabe y está cumpliendo todos los requerimientos y parámetros que se le exijan para poder dar luz verde a su compacto vehículo esférico y de alegres faros: el Proyecto Google Car.
A pesar de ajustar al modelo original varios puntos clave, como controles manuales ordinarios en caso de emergencia, un operador siempre al alcance para evitar que fallas electrónicas produzcan un percance, re-abastecimiento de luces, entre otras, ya está en fase de producción en las instalaciones de Roush Performance, por el momento con 100 unidades, con las cuales se podrá certificar y lanzar a las calles reales.
Google se apoya en Continental, productor de neumáticos y accesorios automotrices, Bosch, herramientas y equipos de trabajo y LG importante compañía electrónica, para habilitar de tecnología y componentes de calidad.
Sin embargo, uno de los mayores impactos en apogeo de las tecnologías alternativas es la aceptación social, pues muchas de los conductores no se sienten cómodos, con la idea de que cerca de ellos podrían encontrarse con vehículos no tripulados. Cabe mencionar que la tecnología moderna ha demostrado ser eficiente respecto a la conducción autónoma, pues sus ajustes inmediatos y conectividades permiten la toma de decisiones inteligentes para evitar accidentes, a diferencia de muchos conductores irresponsables que se sientan frente al volante pese a que estén alcohólicos, cansados o bajo influencia de drogas.
