28 nov 2015
El compositor alemán, Richard Wagner, fue un coloso en el mundo de la ópera, haciendo revolucionarias contribuciones al desarrollo de la armonía y el drama musical. Su obra más imponente fue Der Ring Des Nibelungen ("el anillo de los Nibelungos"), un relato épico de la mitología germánica en cuatro óperas monumentales.
Wagner gozó de tranquilidad doméstica en compañía de sus perros, que eran su orgullo y alegría. Dos de ellos, Russ y Koss, lo acompañaron en sus caminatas diarias. Russ eventualmente fue enterrado a los pies de Wagner en su tumba.
Pero su perro más querido era quizá un King Charles spaniel llamado Pep. Fue una de las pocas criaturas que Wagner expuso sus pensamientos más íntimos.
Pep respondería naturalmente a su maestro cuando este cambiaba el tono de voz con saltos o ladrando correspondiente, pero Wagner descubrió algo más. Comenzó a apreciar que Pep era sensible al tono emocional de la música. Wagner notó que el perro le respondía de diferente manera a ciertas melodías y frases musicales.
