17 mar 2015
Quizá el termino Archeobacteria no sea tan común, de hecho no lo es, pero si explicamos un poco la importancia de estos seres podrías ver porqué son tan exclusivos y extraordinarios.
Las Archeobacterias o también conocidas como bacterias extremófilas son un tipo de microorganismo que puede considerarse "blindado", no es broma, es literal, pues estos son los huéspedes en aquellos inhóspitos sitios, donde ni la imaginación es capaz de habitar.
No es darle mucho crédito, pero sus características respaldan su asignación de “extremas”, Son microrganismo procarióticos, unicelulares, pero con habilidades especializadas, son capaces de soportar temperaturas extremas varias decenas bajo cero y cientos de grados por encima, no necesitan forzosamente la presencia de oxigeno ( la mayoría son anaerobias facultativas), no les afecta la concentración salina de su medio, ni en que condición se encuentre el Ph, pueden habitar ambientes con elevadas cantidades de compuestos tóxicos volátiles, no requieren de presencia de luz, ni se dañan con presiones barométricas extremas, ni fluidez del medio, es decir, si existe un lugar donde no pueda existir vida pluricelular, ahí están ellas, ahí lo fascinante.
Y entonces, ¿por qué ignorarlas? Ellas habitan los cráteres de los volcanes, los polos congelados, las fuentes térmicas en los océanos, en un objeto enriquecido con minerales tóxicos por la corrosión y aquel mar muerto rico en sales, entre muchos otros sitios desapacibles que simplemente no ofrecen alojamiento a otro tipo de ser vivo.
¿A qué nos lleva eso? Sencillo, el análisis y estudio de estos MO logra aclarar, y sin lugar a duda, que si existe vida en otro planeta, el único reino totalmente seguro sería este; Las Archeobacterias, quienes, así como formaron parte de la sopa primigenia, forman parte de nuestro entorno, y formarán parte de nuestro planeta en un futuro cataclismo, son la especie que nos hace envidiar su resistencia, no importase que son las de mayor antigüedad, o las de estructura más simple, lo extraordinario, es su habilidad para adaptarse al medio, y si no es así, actúa la selección natural, sobrevivir las más aptas, mutar y evolucionar, pero nunca desaparecer no importando cual sea la condición que se le presente.
Ahora, imagina un panorama en que esta habilidad facultativa fuera adquirida por el ser humano, no hablamos de la regeneración de las lagartijas al cortarle la cola, No!, estamos hablando de una reestructuración física, química, de patrones, homeostática, de conducta, de requerimientos, todo esto para sobrevivir, no habría un temor a aquello que podríamos considerar un cambio climático, un apocalipsis espacial, todo eso sería absurdo debido a nuestra capacidad de adaptabilidad.
Pero que podemos hacer, irónicamente nuestro sistema por ser más complejo, pluricelular, aerobio forzado, y con estándares de ph y alcalinidad entre muchos otros estándares es más difícil de reestructurar, por no decir imposible, a diferencia de las Archeobacterias cuyos componentes básicamente necesarios les facilitan actualizarse al ambiente.
Ahora analiza; esos Microorganismo estuvieron en nuestro planeta muchos miles de millones antes que nosotros, tomaron justo lo necesario y adaptaron su sistema al planeta o a las condiciones, nosotros a pocos miles de estar como Sapiens Sapiens, hemos adaptado el mundo a nuestro favor, desintegrando todo ese orden, pero, de igual manera que aprovechamos esos recursos que son nuestra fuentes de energía, hablamos de la flora y fauna, todo ello se irá disminuyendo, haciendo que nos sometamos a una prueba de adaptabilidad, lo cual, claro está, no lograremos, tenemos un sistema complejo de equipamiento, con demasiados recursos y restricciones.
El panorama de: ¿qué pasará cuando todo aquello que nos alimenta termine?, es claro, y si leíste con atención podrás responder claramente, ¿Cuándo el planeta termine con una erosionada tierra con solo energía térmica, altamente contaminada y sin capacidad de llevar vida, quienes serán las únicas que sobrevivirán?... Exacto!.
